CBD Oil Europe trabaja con diferentes regímenes de calidad. Nuestro programa de cosméticos se produce bajo: 22716-2007 cosméticos GMP (buenas prácticas de fabricación). Nuestro programa de aceite de CBD convencional se produce bajo, GMP, ISO 9001, HACCP, e ISO 22716-2007 cosméticos GMP (buenas prácticas de fabricación) y embotellado bajo ISO 9001:2015 e ISO 22000:2005 regímenes. Nuestros productos de CBD Aislado, Destilado y Soluble en Agua se producen bajo ISO 9000 y GMP. Cualquier muestreo o reenvasado en la oficina se realiza en una sala blanca modular ISO-5 (última validación el 16-7-2020).

Aceite de CBD con certificación GMP
La certificación de Buenas Prácticas de Fabricación (BPF) es necesaria para comerciar con la industria farmacéutica. No es necesaria ni obligatoria para el aceite de CBD cuando se vende como suplemento alimenticio. ISO 9001 e ISO 22716-2007 GMP cosméticos son suficientes dependiendo de su mercado objetivo. Si necesita productos de CBD con certificación GMP farmacéutica, envíenos una LOI (carta de intención) y su número de registro farmacéutico y le pondremos en contacto con uno de nuestros socios.
La Organización Mundial de la Salud define las prácticas correctas de fabricación del siguiente modo:
Buenas prácticas de fabricación (BPF) es la parte de la garantía de calidad que asegura que los productos se fabrican y controlan de forma coherente según las normas de calidad apropiadas para su uso previsto y según lo exigido por la autorización de comercialización. El objetivo principal de las prácticas correctas de fabricación es reducir los riesgos inherentes a cualquier producción farmacéutica, que pueden clasificarse en dos grandes grupos: contaminación cruzada/mezclas y etiquetado incorrecto.
Las normas BPF se han diseñado para minimizar los riesgos que entraña cualquier producción farmacéutica y que no pueden eliminarse mediante el ensayo del producto final.
Las prácticas abarcan todos los aspectos de la producción, incluida la formación y la higiene personal de todos los trabajadores. Deben establecerse procedimientos para cada proceso que pueda afectar a la calidad del producto final. Estos procedimientos deben redactarse por escrito y deben existir sistemas que garanticen que se siguen los procedimientos adecuados. En cada paso del proceso de fabricación, deben documentarse las pruebas de que se siguen los procedimientos.